24 de octubre de 2012

¡Venciendo el desanimo!



Filipenses 4:4
Alégrense siempre en el Señor. Repito: ¡Alégrense!

Aunque la Biblia nos dice en repetidas ocasiones que estemos alegres, no siempre lo estamos. Hay ocasiones en que nos sentimos desanimados. O andamos con una actitud pesimista.  

A finales del año pasado, científicos de la Universidad de Cornell (EE UU) utilizaron las redes sociales para demostrar que la hora en la que la mayoría de los seres humanos están de buen humor es por la mañana.


Las personas nos levantamos de buen humor pero la sonrisa se los borra de la cara a medida que avanza el día. La investigación, que incluyó el seguimiento de 2,4 millones de personas de 84 países durante dos años.

Algo es cierto, los seres humanos cambiamos nuestro humor de acuerdo a la situación que estamos viviendo. Mira lo que dice la siguiente escritura: Proverbios 15:15 Para el que está afligido, todos los días son malos; para el que está contento, son una fiesta constante.

Analicemos este tema en la vida de unos de los grandes profetas de Dios: Elías.

Elías a lo largo de tres años fue portavoz del Señor para Israel. Efectuó toda clase de milagros y había un despertar espiritual en su nación, la cual se había ido con los ídolos paganos.  

Sin embargo había una persona que no le agradaba Elías, ella era Jezabel, la reina de Israel.  Una mujer muy malvada que odiaba al profeta, en parte porque este gozaba de mucha influencia.

1 Reyes 19:1-2
1 Acab dio a Jezabel la noticia de todo lo que Elías había hecho y de cómo había matado a espada a todos los profetas. 2  Entonces envió Jezabel a Elías un mensajero para decirle: "Traigan los dioses sobre mí el peor de los castigos, si mañana a estas horas no he puesto tu persona como la de uno de ellos".

En otras palabras la reina le mandó a decir a Elías: “Si no te mato en las próximas 24 horas, me preparo para matarte yo misma”.

¿Qué hace Elías?

1 Reyes 19:3-4
Viendo Elías el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida. Al llegar a Beerseba,  que
está en Judá, dejó allí a su criado. 4  Luego de caminar todo un día por el desierto, fue a
sentarse debajo de un enebro. Entonces se deseó la muerte y dijo: "Basta ya, Jehová,
quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres".

Aquí tenemos a Elías, que había sido tan valiente por tres años y ahora, cuando una mujer lo amenaza, se asusta, sale huyendo al desierto y se deprime. Se acerca a un árbol, se sienta junto a él y clama a Dios pidiendo la muerte.

Elías se encontraba físicamente casando, emocionalmente exhausto y alguien había amenazado su vida. En ese momento pasaba por su mente muchas cosas: temor, resentimiento, culpabilidad, ira, soledad y preocupación. Lo increíble de aprender de la Biblia es que dice Santiago 5:17 dice que “Elías era un hombre como nosotros”.

Con las mismas dificultades que nosotros y en este momento estaba desanimado. Había servido, amaba a Dios pero estaba cansado.

¿Por qué llegamos a ponernos así?
Porque muchas veces tenemos pensamientos equivocados rondando por nuestra mente. “Nuestras emociones son el resultado de nuestros pensamientos”.

Si pensamos de manera negativa, entonces vamos a experimentar frustración.
¿Por qué se desanimó Elías? Vamos a estudiar 4 principales razones.

1.  Elías tuvo miedo y huyó.

V.4  Luego de caminar todo un día por el desierto, fue a sentarse debajo de un enebro. Entonces se deseó la muerte y dijo: "Basta ya, Jehová…

Elías se sentó frente al árbol y pidió la muerte. Que en otras palabras era: Señor ya estoy arto, ya no quiero tolerarlo más.  Estoy perdiendo el tiempo. Trato de ser tu siervo pero nadie hace lo correcto. Ya no tiene caso continuar ¡Me rindo!

¿Cuál fue el primer error? Nos concentramos en nuestras emociones y no en los hechos. Elías tuvo miedo, huyo, luego reflexionó, pensó “Soy un cobarde” y se sintió así.

Nuestras emociones nos engañan. Ej. A tal hermano le caigo mal (y juramos que así es). El que experimentemos una situación emocional difícil no significa que lo sea. Pero nos atemorizamos.


2. Comprarse con otros

V4 …Entonces se deseó la muerte y dijo: "Basta ya, Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres".

El segundo error que cometió Elías lo vemos en su segunda declaración:
“ya he aguantado demasiado, Señor, toma mi vida pues no soy mejor que  mis padres”.

Elías comenzó a compararse con otros.

Esto es dañino porque muchas veces cuando las cosas no nos salen bien, nos pegamos una etiqueta. En lugar de decir “cometí un error” decimos “soy un fracaso total”. En vez de afirmar “Ay, me tropecé” decimos “que bruto soy”.  En lugar de declarar “Comí demasiado” decimos “Soy un puerco”.

Cuando nos comparamos con otros nos sentimos peor. EJ. Aquél es mejor que yo. Aquel es más guapo. Si yo tuviera esa agilidad que tiene él. Nada de esto nos ayuda cuando enfrentamos una situación de desanimo.  

Cada uno de nosotros somos únicos. Miremos nuestras huellas digitales, cada uno somos diferentes a los otros. Todos tenemos habilidades y dones que Dios nos dio.

3. Culpabilidad

1 Reyes 19:9-10
9  Allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Llegó a él palabra de Jehová, el cual le dijo:  –¿Qué haces aquí, Elías?10  Él respondió:  –He sentido un vivo celo por Jehová, Dios de los ejércitos, porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares y han matado a espada a tus profetas. Solo yo he quedado y me buscan para quitarme la vida.

El tercer error que cometió Elías fue culparse de todos los hechos negativos que tuvieron que ver con El.

En esencia lo que Elías dijo fue: “He trabajado por tres años y ellos todavía no se han acercado a ti. Lo he intentado en serio, pero ellos siguen viviendo de la misma manera que antes”.

En su depresión, Elías se culpo a si mismo del fracaso de la nación. Lo tomó como si era culpa de Él. A veces vamos a dar consejos, pero los que toman las decisiones son los demás.

4. Exagerar lo negativo.

V.10  Él respondió: –He sentido un vivo celo por Jehová, Dios de los ejércitos,
porque los hijos de Israel han dejado tu pacto, han derribado tus altares y han matado a
espada a tus profetas. Solo yo he quedado y me buscan para quitarme la vida.

El profeta se echó al dolor: “todos están en contra de mi”.
Esto pasa muy común en los matrimonios. EJ. ¡Nunca me escuchas! ¿Será cierto que NUNCA te escucha tu cónyuge? No es cierto, esa es una afirmación exagerada.

Tenemos un problema con un hermano y miramos solo lo negativo de ese hermano.

El hecho era que no todos estaban opuestos a Elías. Solo una persona estaba en su contra con violencia, y su amenaza realmente no era en serio. Si Elías hubiese meditado un poco, en vez de hacerle caso a sus emociones, se habría dado cuenta de que Jezabel no se hubiera atrevido a matarlo.

Cierto es que la reina le envió un mensajero con la amenaza de: “Mañana te voy a matar”.  Pero si Jezabel realmente hubiese querido matar a Elías, no habría enviado al mensajero para advertirle sino a un asesino.

Jezabel era demasiado astuta para quitarle la vida a Elías. Ella reconocía su gran influencia. Si el moría, se habría convertido en un mártir, aumentando así su influencia y hasta hubiera provocado una revolución entre el pueblo.

En realidad Elías no era la única persona fiel a Dios, había siete mil profetas que no habían sucumbido a la religión pagana.

Cuando exageramos lo negativo muy pocas veces vemos a Dios.

Si Elías se hubiera detenido a analizar hubiera visto todo esto. Pero simplemente huyó.

¿Cuál fue el remedio para la depresión y desanimo de Elías?

V.15  Entonces el Señor le dijo: “Ve, regresa al desierto de Damasco por donde viniste. Ve y consagra a Hazael como rey de Siria,[i]

Mira el trato que Dios le dio a Elías, no le dijo ¡Eres un cobarde! ¿Qué haces aquí en el desierto? Dios sencillamente lo restauró.

La solución a nuestro desanimo es simple. Nuevamente escuchar a Dios. Nuevamente hacer lo que no estamos haciendo.

Santiago 5:13
Si alguno de vosotros está afligido, que ore.
Si alguno está contento, que cante alabanzas.


La solución es simple: Orar. El problema es que cuando estamos afligidos no queremos orar a Dios. Muchas veces nos quedamos con todos los pensamientos negativos en nosotros.

Pero la Biblia nos dice, si alguien está afligido que ore. ¿Qué hizo Jesús cuando sintió una tristeza de muerte? Oro. ¿Cuántas veces oró? 3 veces. Jesús habló con sus amigos de cómo se sentía. Jesús también se desahogó con Dios.

Salmos 42:5
¿Por qué voy a desanimarme? ¿Por qué voy a estar preocupado? Mi esperanza he puesto en
Dios,a quien todavía seguiré alabando.¡ Él es mi Dios y salvador! 6  Me siento muy
desanimado. Por eso pienso tanto en ti desde la región del río Jordán, desde los montes
Hermón y Misar.[g]


Recordemos las palabras de este Salmista: ¿Por qué voy a estar desanimado? Me siento muy desanimado pero pienso en ti. A Dios le interesan nuestro problema, Él como todo Padre bueno se interesa por sus hijos, solo tienes que recordar de donde viene tu ayuda, arrodillarte delante de Él y confiar que Dios quitará el desanimo en tu corazón y te dará una solución a tus problemas.